El paraíso de Filipinas en 15 días

Espléndida, rodeada de agua y con más de 7.000 islas que se erigen como un paraíso distinto en un archipiélago enorme donde la pregunta no es, ¿qué puedes hacer?, si no, ¿qué no puedes hacer?

Entre medio de dos mundos, Filipinas se contagia y fusiona de lo mejor que la rodea. Filipinas no es solo playa, aunque poca envidia a la Indonesia que la mira a lo lejos, también es ciudad, influenciada por el gigante asiático que la resguarda desde la costa, China. Y la aventura teñida de verde y bosque, habitual de los archipiélagos paradisíacos. Filipinas es un país con personalidad propia para unir en un mismo destino todo lo que los amantes de la naturaleza y la tranquilidad buscan en medio de la aventura.

Manila capital 

Colonia española, la capital Manila te da la bienvenida con un toque que te resultará familiar. Todavía mantiene gran parte de la arquitectura construida en su época colonial española como el Fuerte de Santiago, la Catedral o la Iglesia barroca de San Agustín. Visitas obligatorias en una ciudad que lejos de la Península Ibérica, recuerda a la Castilla más clásica. Filipinas es el único país de todo el continente asiático que, todavía, cuenta con un gran número de tradiciones hispánicas. Una influencia que se extiende por todo su territorio y que encuentra su máxima representación en la capital.

Un estilo marcado por el lujo español de la época que se traslada también a los dos alojamientos recomendados; The Peninsula Manila y Makati Shangri-La. Dos hoteles ubicados en el distrito financiero de la capital referentes en servicio, sofisticación y experiencias gastronómicas únicas en lo que se considera para visitantes y también los locales que los frecuentan, el paraíso de la comodidad.

Además, The Peninsula cuenta con la distinción Serandipians, como también Bestours Viajes, donde el lujo y el confort son atributos tangibles en cada estancia.

Foto: The Peninsula Manila

Foto: Makati Shangri-La

Cebu City

La segunda ciudad más importante del país y el enlace directo a la aventura. Una isla que se tiñe de verdes y azules. Conocida como la puerta de entrada al paraíso, Cebu es la carta de presentación a lo que te espera en el resto del país.

Para los aventureros hay dos visitas indispensables: las cascadas de Kawasan y Oslob, meca para avistar al animal más grande del planeta, el tiburón ballena.

Kawasan te espera con más de 1.000 cascadas en toda la isla. Los amantes de la adrenalina y el salto encuentran en Cebu City el paraíso hecho realidad. Una experiencia única para sentirse parte de la naturaleza mientras puedes lanzarte de distintas alturas en caída libre hacia aguas cristalinas.

Las mismas aguas que ya en mar abierto, son el hogar del mamífero más grande del mundo, el tiburón ballena. Nadar junto a estos mamíferos es una experiencia incomparable. Una vivencia única al alcance de muy pocos que, de nuevo, la firma hotelera Shangri-La, eleva a otra dimensión con su alojamiento Shangri-La Mactan. Un resort de 13 hectáreas llenas de vegetación, jardines y playas de arena blanca para encontrar el equilibrio perfecto entre relajación y aventura donde cada día existe un plan distinto con el que sorprenderse.

Foto: Shangri-La Mactan

Foto: cascadas de Kawasan

Rumbo a Bohol

Una de las islas más bellas de todo el archipiélago y famosa por sus conocidas ‘Chocolate Hills’. Una colina de montañas que, en cada atardecer, el sol se encarga de ‘tostar’ para regalar unas vistas únicas.

Una isla que ofrece posibilidades para todos los gustos. Desde cascadas, tirolinas, playas paradisíacas, excursiones en jeep, trekking o buceo para conocer toda su fauna autóctona bajo el mar. De entre todas sus posibilidades, ver a los tarseros es imprescindible. El primate más pequeño del mundo que vive en absoluta paz y al que no se le puede alterar. Una paz que también se traslada debajo de sus aguas cristalinas. Panglao Island esconde entre sus aguas uno de los mejores destinos del archipiélago para sumergirse en un mundo de color y vida.

Una visita que recomendamos compaginar con la vida relajada y armoniosa que ofrece Eskaya Beach Resort & Spa. Un complejo basado en la calma de la isla para que disfrutes de algunos de los mejores tratamientos wellness del país.

Foto: Chocolate Hills

Foto: Pangalo Island en Bohol

La Ibiza de Asia

Un viaje a Filipinas no se concibe sin conocer una de las islas más famosas del país, Boracay. Apodada popularmente como la Ibiza de Asia, el paraíso de playa está disponible de día y de noche. Alberga una de las playas más famosas de Filipinas, la White Beach, y pese a que es una de las islas más concurridas, Boracay es sinónimo de visitar uno de los mejores parajes de todo el archipiélago.

Un destino de lujo que alberga el alojamiento premiado como uno de los mejores resorts de Asia en 2021 por Condé Nast Traveler, el Shangri-La de Boracay. Ubicado en una bahía protegida de la costa norte de la isla, el toque filipino se extiende por sus más de 219 habitaciones y exclusivas villas para que el brillo del océano te rodee desde todos los puntos posibles.

Foto: Shangri-La de Boracay

La verdadera joya de Filipinas

“Lo mejor para el postre” se dice popularmente y, en esta ocasión, la sabiduría popular rinde homenaje al dicho. Palawan es la joya de Filipinas. Sin duda, la zona más paradisíaca de todo el archipiélago. De exuberante naturaleza verde tropical, acantilados rocosos e islotes de arena blanca rodeados de aguas cristalinas y arrecifes de coral. Es la meca para los amantes del buceo y descubrir la infinidad de vida marina que habita sus costas. Palawan no es una isla, si no una provincia de 1.700 islotes que compiten por un trozo de cielo.

Amanpulo de la prestigiosa cadena Aman, es uno de esos trocitos de tierra que albergan la magia del destino y el lujo incomparable de una firma que convierte en excepcional allá donde se ubica. Amanpulo es la estancia definitiva para conocer la belleza de Palawan en una isla privada con arrecifes vírgenes y playas exclusivas. Todo diseñado para encontrar la comodidad y privacidad que ya de por sí, ofrece este paraíso tropical.

Fotos: Amanpulo

Una última escapada

Para aquellos que quieran conocer algo más, la extensión a Siargao es la forma perfecta de terminar la aventura filipina. La niña bonita del país donde no solo sus playas son un reclamo, si no también sus olas. Un paraíso para surferos y también para ver algunos paisajes que quitan el hipo. Desde Masin River, donde los locales se tiran con las lianas al río, pasando por Sugba Lagoon, un lago de agua turquesa rodeado de rocas milenarias y acabando por Magpupungko, un sinfín de piscinas naturales que mueren en la playa.

Una visita ideal que desde Bestours Viajes recomendamos terminar en el alojamiento Nay Palad Hideaway. La mezcla perfecta entre bosques ancestrales y playas de arena blanca que invitan a caminar descalzo y fundirse entre tanta naturaleza.

Fotos: Nay Palad Hideaway