Ayer lunes 1 de enero de 2024, un fuerte terremoto de magnitud 7.6 golpeó las costas de Japón, lo que provocó daños estructurales y activó la alerta de tsunami.
A las 16.10 horas se produjo un terremoto de magnitud 7,6 en la prefectura de Ishikawa, golpeando especialmente a la ciudad de Wajima,
Tras el potente seísmo, seguidamente golpearon varias réplicas que dispararon las alertas de tsunami en parte del archipiélago. Las primeras olas, con una altura de 1,20 metros, llegaron a Wajima, que se encuentra a unos 500 kilómetros al oeste de Tokio.
Horas después del pánico inicial, el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico, con sede en Hawái, aseguraba que el riesgo de tsunami había quedado atrás. Lo mismo anunciaron poco más tarde las autoridades niponas.
Afortunadamente, el episodio sísmico ha afectado a una zona muy concreta del país y la alerta por tsunami, inicialmente emitida, ha sido desactivada.